El destino, la meta, la conocemos todos: El campeonato, pero este FAS parece desconocer la manera de mantenerse ganando y liderando.
Otro empate y FAS suma cuatro fechas sin ganar, luego del agónico triunfo ante Santa Tecla y otro cerrado sobre Once Deportivo, FAS se olvidó de ganar. O al menos como lograrlo.
Naufragio en casa, cuando la cosa pintaba bien gracias a un gol de penal del mexicano Ángel Mendoza, penalti cometido sobre Stradella.
Pero más allá del dominio abrumador, de las llegadas constantes de peligro, de la sensación de que podríamos aumentar la cuenta en cualquier momento, estaba esa falta de claridad en la zona de gol, ese último pase que genere el tanto.
No pasó apuros defensivos FAS, con un tan solo remate peligroso por parte de Baires, Tecla fue inofensivo en el primer tiempo, Gersón López no sufrió.
Para el complemento las cosas tampoco variaron demasiado, FAS con dominio total, constante pero intrascendente, Tecla con juego fuerte ante un árbitro sospechosamente permisivo. Tan indulgente fue el central que hasta dos jugadores tecleños debieron ver la roja directa pero quedaron sin sanción.
Zambrano apostó por apuntalar el resultado, por refrescar la sala de máquinas, pero el destino le jugó una mala pasada, a Erivan Flores lo tomó aun frío su primer pelota del partido y tras una locura en el área César Flores empató el juego con un derechazo desde la frontal.
FAS aceleró en un intento desesperado de retomar la ventaja, pero fue imposible, en parte gracias al línea oriente, quien vio adelantado a Stradella cuando realmente estaba habilitado y marcaba el 2-1.
Un resultado que deja a FAS en cuarto lugar y un sinsabor más en la fiel azul y rojo, que se marchó a casa con la lluvia incapaz de enfriar los ánimos caldeados por la desazón.